La Ciudad de México enfrenta una alta incidencia delictiva debido a distintas causas estructurales y sociales, como desigualdad económica, concentración poblacional y problemáticas en el acceso a empleo y educación. Sin embargo, el panorama es alentador, pues disminuyen 50% delitos en CDMX.
La coordinación entre la Secretaría de Seguridad Ciudadana y la Fiscalía, así como programas de prevención, buscan reducir la incidencia delictiva, pero la convivencia urbana densa y los factores sociales complejos mantienen el reto vigente.
En lo que va de 2025 se reportó una disminución del 66% en delitos de alto impacto y del 50% en homicidios dolosos hasta abril de 2025, y una reducción del 50% en feminicidios de enero a julio de 2025.
Los delitos de alto impacto son los que generan una mayor percepción de inseguridad y afectan directamente la convivencia ciudadana, por lo que su reducción incide directamente en Economía: Puede desalentar la inversión y afectar el comercio local, pues la gente reduce su movilidad y consumo en ciertas zonas consideradas inseguras la calidad de vida de las personas, la confianza hacia las autoridades y en la legitimidad de las políticas públicas de seguridad, además de la movilidad urbana.