Tras la tragedia ocurrida en la alcaldía Iztapalapa, donde una pipa de gas volcó y explotó el pasado 10 de septiembre, la Fiscalía CDMX ha dado a conocer que el chofer de la pipa iba a exceso de velocidad.
Sucedió en la Calzada Ignacio Zaragoza, a la altura del Puente de la Concordia, y el accidente suma ya 20 víctimas mortales, además de decenas de heridos, muchos de ellos todavía en estado crítico.
Entre las víctimas se encuentra, Fernando Soto Munguía, chofer de la pipa que explotó con 49 mil litros de gas propano, quien perdió la vida la noche del 16 de septiembre a causa de quemaduras severas. Sin embargo, continúan las investigaciones y su nombre en medio de la polémica.
La Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México indica que el accidente fue causado por exceso de velocidad y falta de pericia del conductor, quien perdió el control al tomar una curva con pendiente ascendente, impactando contra dos muros de contención, lo que provocó la volcadura de la pipa.
El contenedor de la pipa sufrió una fractura de aproximadamente 40 centímetros, lo que ocasionó una fuga de gas en un radio de 180 metros que generó la chispa que detonó el incendio. La explosión dañó severamente vehículos y viviendas cercanas, algunas de las cuales quedaron inhabitables por completo. Además, el impacto generó un incendio de gran magnitud que afectó calles y espacios públicos, obligando a desalojos masivos para proteger a la comunidad.
En la última conferencia de prensa que ofreció la fiscal de la Ciudad de México Bertha María Alcalde dio a conocer que, aunque la hipótesis más fuerte apunta al exceso de velocidad, se mantienen otras abiertas.
Desgraciadamente, las muertes desde que se volcó la pipa hace casi una semana van en aumento, y es que algunas de las víctimas tienen quemaduras en hasta el 90% del cuerpo, dañando gravemente la barrera protectora de la piel, lo que aumenta enormemente el riesgo de infecciones graves y septicemia. La respuesta inflamatoria en el cuerpo, por su parte, puede llevar a fallos en múltiples órganos vitales.