La importancia de la salud mamaria radica en conocer la apariencia y textura normales de los senos. A pesar de las pruebas periódicas de mamografía en la detección del cáncer de mama, no todos los casos se detectan de esta manera. Por ello, es crucial estar alerta ante cambios en los senos y conocer las señales de alarma.
El síntoma más frecuente del cáncer de mama es la presencia de un bulto nuevo. Si este bulto es duro, irregular y no doloroso, es más probable que sea cáncer, aunque también puede presentarse como una masa suave y dolorosa. Cualquier cambio mamario debe ser examinado por un profesional de la salud.
Otras señales de cáncer de mama pueden incluir hinchazón en el seno, piel con hoyuelos similar a la cáscara de una naranja, dolor en el seno o pezón, retracción de los pezones, piel del pezón o seno con alteraciones, secreción anormal del pezón y ganglios linfáticos inflamados.
Aunque estos síntomas pueden tener otras causas, es esencial informar a un profesional de la salud si se presentan. No obstante, la detección temprana de cáncer de mama mediante mamografías sigue siendo fundamental para aumentar las posibilidades de tratamiento efectivo.
